QUE NO SE CORTE

Cuando algún ser interesante en algún sentido se va mas allá de una llamada telefónica, aparecen los mails.
Llega el primero, el que da aviso que el arribo fue exitoso, al que se le contesta con un mail que advierte el alivio de que todo haya salido bien y en el que se agrega una cuota de interés sobre el nuevo paisaje.
Ya unos días después, llega el mail que describe, casi con desgano, las maravillas del sitio.
ahora varios días mas tarde, aparece el que denota cierta falsa emoción por la suerte ajena, pero que como los anteriores deja un fino hilo conductor hacia, mínimo, la necesidad de dar acuse de recibo.
A veces lo mejor es tomar por opción la frágil resistencia que se opone a este sistema de coneccion forzada por su sola existencia.
Siempre es adecuado recordar que... No por mucho madrugar, se amanece mas temprano.
Y no estoy es cuestión de escatimar, solo de no derrochar.