KILL ME

Esa gente que cuenta con tono supremo que hace 25 años que se dedica a eso.
Pobres.

QUE NO SE CORTE

Cuando algún ser interesante en algún sentido se va mas allá de una llamada telefónica, aparecen los mails.
Llega el primero, el que da aviso que el arribo fue exitoso, al que se le contesta con un mail que advierte el alivio de que todo haya salido bien y en el que se agrega una cuota de interés sobre el nuevo paisaje.
Ya unos días después, llega el mail que describe, casi con desgano, las maravillas del sitio.
ahora varios días mas tarde, aparece el que denota cierta falsa emoción por la suerte ajena, pero que como los anteriores deja un fino hilo conductor hacia, mínimo, la necesidad de dar acuse de recibo.
A veces lo mejor es tomar por opción la frágil resistencia que se opone a este sistema de coneccion forzada por su sola existencia.
Siempre es adecuado recordar que... No por mucho madrugar, se amanece mas temprano.
Y no estoy es cuestión de escatimar, solo de no derrochar.

ERA MUDA

Estoy como con una especie de diarrea verbal, tengo ganas de decir de todo todo el tiempo, se me ocurren cosas para decir en todo momento, criticas, comentarios, observaciones, pensamientos, conclusiones, reproches, preguntas, aclaraciones, bocadillos, remates, objeciones, reflexiones, argumentos, pero ninguna respuesta para dar.

GLORIOSA ANSIEDAD

Creo que debería empezar a tratar mi temita con la ansiedad.
No es joda, los niveles de exitacion a los que llega mi cerebro son monumentales.
Mi cuerpo se paraliza, torturaría a quien sea necesario para acelerar las cosas, para que llegue el momento, transpiro frió y caliente a la vez, mi corazón se agita, los ojos se me llenan de lágrimas, me arremeten ganas locas de dar una vuelta manzana corriendo, de gritar como un alien, tiemblo.
A la vez se que debo controlarme, la gente no debe notarlo. me es muy difícil, las palabras salen solas de mi boca, recurro a los mas intrínsecos discursos para intentar distraer. Mayormente no salen mas que balbuceos idiotas, es porque mi mente vuela, le gana a la velocidad de mi boca.
Finalmente y cuando ya no puedo mas, dos soluciones aparecen: 1- pasa.  2- mi cerebro, ante la necesidad de hacer que mi sistema nervioso no colapse, comienza con mecanismos del tipo descalificativo, tiempo después, según cuan intensa haya sido la cosa que me genero el pequeño ataque, se desvanece, me invade un sentimiento de vergüenza ajena y finalmente todo fluye como si nada hubiese pasado.
Y así paso los días en espera de una nueva emoción.